El Arsenal y el Liverpool no lograron pasar del empate en la primera jornada de la Premier League un campeonato que lidera de manera provisional el Bolton, a la espera de que el domingo y el lunes debuten tres de los favoritos al título, el Chelsea, el Manchester United y el Manchester City.
Tras una semana en la que la ola de violencia que se extendió por Inglaterra puso en duda la idoneidad de disputar los primeros encuentros de la Premier League, finalmente sólo se suspendió el Tottenham-Everton, que se iba a jugar esta tarde en el barrio londinense donde la semana pasada estallaron los primeros altercados.
En St James Park, ante la ausencia de Cesc Fábregas y Samir Nasri, ambos en proceso de abandonar el Arsenal, el centro del campo de los de Arsene Wenger sufrió para conectar con su delantera frente al Newcastle (0-0). Los gunners trataban de alcanzar la portería rival con balones largos hacia sus delanteros, o bien obligaban a Van Persie a retrasar su posición para encontrar la pelota.
A pesar del cambio de Arshavin por Walcott, al inicio de la segunda mitad, para tratar de dar aire al centro del campo, el Arsenal continuó con dificultades para penetrar en el área del Newcastle, y concluía gran parte de sus ataques con tiros lejanos que no inquietaban al portero rival. La impotencia del Arsenal la escenificó Gervinho a un cuarto de hora del final, cuando el delantero marfileño fue expulsado por golpear a Joey Barton.
En Anfield, el Liverpool, en el que hoy debutó el español José Enrique, no supo pasar del empate a uno ante el Sunderland, a pesar de haberse adelantado en los primeros compases del partido. En el minuto doce, el uruguayo Luis Suárez remató de cabeza un balón parado para anotar el primer gol de la temporada en la Premier League y situar a su equipo por delante en el marcador, después de haber fallado un penalti seis minutos antes.
Suárez, que fue elegido mejor jugador en la última Copa América, es uno de los futbolistas fundamentales en el equipo que entrena Kenny Dalglish, que todavía se resiente de la marcha la temporada pasada de su principal estrella, el español Fernando Torres.
El Sunderland trató sin éxito en la primera parte de romper el dominio del Liverpool en el centro del campo, pero hizo valer un espectacular remate de Larsson desde dentro del área del portero español José Reina para igualar el encuentro al inicio de la segunda parte.
Tras una semana en la que la ola de violencia que se extendió por Inglaterra puso en duda la idoneidad de disputar los primeros encuentros de la Premier League, finalmente sólo se suspendió el Tottenham-Everton, que se iba a jugar esta tarde en el barrio londinense donde la semana pasada estallaron los primeros altercados.
En St James Park, ante la ausencia de Cesc Fábregas y Samir Nasri, ambos en proceso de abandonar el Arsenal, el centro del campo de los de Arsene Wenger sufrió para conectar con su delantera frente al Newcastle (0-0). Los gunners trataban de alcanzar la portería rival con balones largos hacia sus delanteros, o bien obligaban a Van Persie a retrasar su posición para encontrar la pelota.
A pesar del cambio de Arshavin por Walcott, al inicio de la segunda mitad, para tratar de dar aire al centro del campo, el Arsenal continuó con dificultades para penetrar en el área del Newcastle, y concluía gran parte de sus ataques con tiros lejanos que no inquietaban al portero rival. La impotencia del Arsenal la escenificó Gervinho a un cuarto de hora del final, cuando el delantero marfileño fue expulsado por golpear a Joey Barton.
En Anfield, el Liverpool, en el que hoy debutó el español José Enrique, no supo pasar del empate a uno ante el Sunderland, a pesar de haberse adelantado en los primeros compases del partido. En el minuto doce, el uruguayo Luis Suárez remató de cabeza un balón parado para anotar el primer gol de la temporada en la Premier League y situar a su equipo por delante en el marcador, después de haber fallado un penalti seis minutos antes.
Suárez, que fue elegido mejor jugador en la última Copa América, es uno de los futbolistas fundamentales en el equipo que entrena Kenny Dalglish, que todavía se resiente de la marcha la temporada pasada de su principal estrella, el español Fernando Torres.
El Sunderland trató sin éxito en la primera parte de romper el dominio del Liverpool en el centro del campo, pero hizo valer un espectacular remate de Larsson desde dentro del área del portero español José Reina para igualar el encuentro al inicio de la segunda parte.
