16 AÑOS DE ESPERA

Portugal tuvo que esperar 16 años para encontrar una revancha. En los cuartos de final de la Eurocopa 1996 los lusos cayeron por la mínima diferencia ante República Checa, cuatro torneos continentales después el destino los vuelve a encontrar en la misma instancia, donde los pupilos de Paulo Bento esperan devolverle la eliminación a los checos.

Hace 16 años, dos años después de que Checoslovaquia se dividiera en República Checa y República de Eslovaquia, en su primer Eurocopa los checos dieron la sorpresa de la Euro que se celebró en Inglaterra. Después de vencer en la fase de grupos a Italia y empatar con Rusia, eliminaron en cuartos de final a Portugal, que llegaba a esa instancia invicto y como líder de su sector.

Un solitario gol de Karen Poborsky fue suficiente para que los checos dejaran en el camino a un conjunto luso plagado de figuras como el definidor Luis Figo, el cerebro Rui Costa y el guardameta Vítor Baía.

En su torneo continental de debut, los checos derrotaron en semifinales desde los 11 pasos a Francia y en la final cayeron ante Alemania 2-1. Fue su mejor participación en una Eurocopa desde que fueron campeones en Yugoslavia 1976, aún como Checoslovaquia.

Portugal ya no es encabezado por Luis Figo, quien fue considerado en su tiempo el mejor jugador del mundo. Ahora su estrella es Cristiano Ronaldo, el astro del Real Madrid que en el 2008 ganó el Balón de Oro como el mejor futbolista del mundo, mismo año en que Portugal cayó en la final de la Eurocopa.

Luego de sus dos primeras presentaciones en las que Ronaldo fue criticado por no hacerse presente en el marcador, en el tercer partido el delantero luso sacó la casta y anotó dos goles que le dieron el triunfo a su selección ante Holanda. Su participación en el torneo puede definir quién ganará el Balón de Oro que compite con Lionel Messi.

LOS NÚMEROS ESTÁN CON PORTUGAL

Aunque en el cruce República Checa fue número uno del grupo A, mientras que Portugal calificó como segundo del sector B, las estadísticas en el torneo continental favorecen a los lusitanos. El conjunto que dirige Paulo Bento ha realizado 50 disparos a portería por encuentro por 35 de su rival en los cuartos de final.

Además ha marcado en cinco ocasiones, una más que los checos; los lusos también han conseguido 24 tiros de esquina por 15 de los pupilos de Michal Bílek y han estrellado tres veces el balón en el poste por ninguna de su próximo rival.

Las cifras del torneo están de lado de Portugal, un conjunto que tiene la oportunidad de cobrar revancha de 1996 cuando República Checa de manera sorpresiva los eliminó en cuartos de final.